Ya tenemos aquí nuestra fiesta. El día de la rosa y el libro, que ya he dicho anteriormente que me encanta. Este año tenemos muchísimas novedades en la calle y esperamos que todas tengan lectores, ya que desde mi punto de vista, hay espacio para todos y un libro para cada persona. Así que hoy no voy a recomendar nada en concreto, me apetece pediros que disfrutéis del día 23 al máximo, y que entre tanto libro, escojáis aquel que más os apetezca para que os abra el hambre de leer para que ya no sólo sea un día concreto el que sea una fiesta comprar un libro, sino que el libro se convierta en un compañero de viaje indispensable. A los “adictos” nos encanta leer siempre que podamos, pero a los que todavía no lo tenéis claro, probad de llevaros una buena novela para un viaje largo de avión, probad leer antes de iros a la cama, es un placer para terminar bien el día, probad de leer en la playa, un momento kit-kat estupendo. Os aseguro que cada libro puede tener su momento y que yo he leído muchos manuscritos de mis autores, de los cuales me acuerdo cuando y donde los he leído, ya que el texto me ha calado. Libros como EL RELATO DE GUNTER PSARRIS de Albert Salvadó, para mi una de sus mejores novelas, la leí mientras viajaba a Turquía, LOS BOSQUES DE UPSALA de Álvaro Colomer, un fin de semana de mal tiempo en Sant Pol, y no lo podía dejar, OJALA ESTUVIERAS AQUÍ de Francesc Miralles, un verano en la playa y me duró sólo un par de días. Estas vacaciones, NUNCA FUIMOS A KATMANDÚ de Lola Mariné, y me dejó tan buen sabor de boca que estoy esperando que se publique para recomendarla a todas mis amigas, y así podría seguir con muchos. Así que espero que todos encontréis vuestro momento y vuestra lectura, no os arrepentiréis y querréis repetir.