¡Me encanta la Navidad! Parece que afirmar esto no esté de moda, últimamente he hablado con mucha gente que le cargan las fiestas, no les gustan y  no las disfrutan, creen que son una  parafernalia que no les va, y les entiendo, porque quizás las han vivido de un modo que nunca les ha llenado, y pienso que tiene mucho que ver cómo tu familia te ha transmitido ese espíritu navideño. Sin embargo, yo no puedo esconderlo y disfruto viendo cómo las calles se iluminan, cómo los escaparates se visten de gala,  cómo nos inundan los anuncios navideños y cómo los pequeños quedan embobados con la magia del Papá Noel y los Reyes Magos, aunque en mi casa no viene Papá Noel sino el tradicional Caga Tió catalán, porque así lo hemos hecho siempre.

Sé que muchas de estas cosas se relacionan con el consumismo y por eso mucha gente no está de acuerdo con estas fiestas, pero para mí son muy especiales porque siempre las hemos vivido con ilusión. Han habido épocas que hemos podido hacer más cosas y otras menos, pero siempre las hemos vivido con alegría y como un momento en el que la familia reafirma la unión, ya que aunque parezca mentira nuestra familia se reúne semanalmente y para nosotros cada fin de semana podría ser Navidad, por tanto lo típico que muchos dicen que hay familias que sólo se reúnen porque las fechas lo indican no por que quieran, no es tampoco mi caso, y tengo la inmensa suerte que nos vemos muy a menudo y la única razón es porque nos gusta, porque estamos bien juntos y desde el más pequeño al más mayor, encuentra especial poder compartir ese momento.

Durante las fiestas, todavía es más especial y seguimos las tradiciones que nuestros abuelos ya enseñaron a nuestros padres y que yo espero poder dejar como legado a la nueva generación, dado que las vivimos con tanta intensidad que estoy segura que es una de las buenas cosas que  podremos dejarles como “herencia”. Mis recuerdos son preciosos, puedo oler todavía la sopa de pescado que mi abuela preparaba el día 24  con unas ganas de que todo estuviera perfecto, y lo estaba, puedo sentir la ilusión con la que esperábamos el comienzo de las fiestas con mis padres y mis hermanos decorando la casa y saliendo a pasear por la feria navideña de la catedral. Y tantos y tan buenos momentos compartidos en familia, con muchos que ya no están, pero que seguro que están orgullosos de ver cómo hemos seguido celebrando estas fiestas, ellos nos marcaron el camino, y nosotros lo hemos seguido con entusiasmo y gratitud.

Hoy no voy a recomendar un libro sino un MENÚ NAVIDEÑO muy especial porque otra de las cosas que todos hacemos estas fiestas es COMER, y por tanto estoy segura que nuestra carta para estas fiestas os va a sorprender y disfrutaréis de cada uno de los platos. Además, tomad buena nota porque son platos que no ENGORDAN NI CADUCAN, así que ¡¡BUEN PROVECHO!!

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