Vive y deja vivir
Cada vez es más habitual ver a mujeres en altos cargos, mujeres activas, emprendedoras y que compaginan la vida laboral con la familiar sin problemas y adaptándose a nuestra sociedad. Es verdad que todavía quedan muchas cosa por pulir, pero muchas de nosotras gozamos de una independencia, de un poder decidir, que tiempo atrás era imposible, sin embargo en otras partes del mundo las cosas no son tan sencillas, sobretodo para las mujeres, e incluso en nuestro país se está haciendo una “cuestión de estado” la prohibición del velo y se juzga, de nuevo, a las mujeres musulmanas por algo que forma parte de una tradición, de algo que forma parte de su cultura. No quiero entrar en un debate de burka si o burka no, lo que creo que es importante es que la gente no debería poder prohibir, imponer nada, deberíamos ser capaces de saber convivir, por un lado unos adaptándose al lugar donde están, sin tener que renunciar a cosas que tampoco molestan a los demás, y por el otro intentando hacer posible que la gente se sienta lo menos encorsetada posible. Yo defiendo el lema VIVE Y DEJA VIVIR, y pienso que si muchos pensaran igual, seríamos capaces de minimizar las cosas, porque la mayoría de veces, cosas que parecen muy importantes, básicas, como es el caso del velo, si lo relativizas quizá seríamos capaces de repensar el tema y darle la importancia que merece.
Han habido mujeres muy transgresoras en la historia y también se ha escrito mucho sobre ellas, pero me gustaría poder recomendaros un buen ejemplo de una mujer “normal”, de hoy en día, y que seguro os va a gustar conocer. Ella es MARJA BATELAAR, la inspectora creada por Jaume Benavente y que podréis descubrir leyendo la novela EL CUADERNO DE NICOLAAS KLEEN, publicada por Columna y Roca. Es la novela ideal para este verano, por su personaje, por su forma, y sobretodo porque viajarás a Ámsterdam “gratis”, a través de su mirada, de su aventura, una novela negra en mayúsculas, y estoy convencida que no os va a defraudar. Y no me quiero sentir culpable, si después de leerla, tenéis unas ganas locas de descubrir o redescubrir la capital holandesa. ¡Feliz viaje!
«Vive y deja vivir» Es uno de mis eslogans favoritos y una manera de entender la vida. Seria más sencilla la convivencia, las relaciones, si la practicáramos con asiduidad.
He leído el primer capítulo de la novela EL CUADERNO DE NICOLAAS KLEEN, en el Bolc del Vilolista Celest y me ha parecido excelente. MARJA BATELAAR va a cautivarnos, estoy segura!
Mi enhorabuena a Jaume Benavente y a todas las mujeres que han emergido, con una gran dosis de esfuerzo, de la opresión, del miedo y la invisibilidad. Estoy segura que ambos sexos, en igualdad, podemos construir una sociedad mejor; debemos hacerlo.
Lo mio, Bruno, siempre es sumar 😉
Un abrazo.
VIVE Y DEJA VIVIR…Las mujeres realmente cada vez accedemos a más independencia, aunque la conciliación en muchos casos es una batalla discreta en la sombra y en solitario…MADRE HACIENDO MALABARISMOS PARA TENER CIERTO EQUILIBRIO LABORAL, FAMILIAR Y A PODER SER EMOCIONAL.
En mi entorno el modelo predominante es el ejecutivo con jornadas maratonianas…reuniones interminables…No hay un modelo directivo a seguir que predique la conciliación!!!
¡Estoy reflexionando que en las últimas novelas que he leído, las mujeres toman el protagonismo!
Y me apunto al viaje a Amsterdam, en verano es buen momento para viajar aunque sea literariamente.
Mente viajera y soñadora desplazándose a otros universos posibles…apasionante!ME APUNTO, AMSTERDAM ME ESPERA!!!!
¿Nos vemos en Ámsterdam?
Ui Bruno… quin tema has tret…
Quan sento despotricar contra el niqab (vel integral tipus monja, que només deixa veiure una ratlleta pels ulls) penso en quines són les esclavituds de la dona moderna, la ‘nostra’, l’occidental.
El niqab és una submissió a l’home: això no es pot discutir. L’home nana que la dona es tapi.
Però a la nostra banda… ha pitjor submissió als homes, que l’obsessió de voler estar sempre morenes, depilades, joves, primes i guapíssimes, sigui quina sigui la nostra edat? Hi ha més humiliació que caure en les ganes d’operar els pits per tenir-los més grans i turgents? Passar per un quiròfan -poca broma-, només per agradar més als homes? O per a fer-se una ‘lipo’? O una abdominoplàstia? o pitjor… una -cada cop més freqüent- vaginoplàstia? Hi ha més incomoditat i més tortura per a uns peus de dona, que unes sabates -sobretot quan són noves- amb 10 o 12 centímetres de tacó? Hi ha més dependència i més malbaratament de diners, que l’esclavitud d’haver d’anar sempre depilades, aixelles, engonals, cames, i fins i tot genitals, com s’està posant de moda? I la peluqueria? Per què cal tenyir sí o sí? Perquè no queda sexi tenir cabells blancs?
Veig un capítol de ‘Sex in the City’ (=Sexe a Nova York) i no sé si és pitjor allò, o un niqab. No ho sé. La veritat, jo, personalment, detesto, però DETESTO, totes dues coses.
Qui estigui lliure de pecat, com deia aquell, que llanci la primera pedra.
Jaumet
La mujer y la libertad, ¡qué tema tan difícil y candente has tocado! Con estas últimas polémicas sobre el burka, me sorprendió y me hizo pensar mucho leer las declaraciones de Silvia Martínez, regidora de inmigración de Cunit, que conoce muy bien a las mujeres musulmanas de su entorno y opina que no las vamos a «liberar» a base de prohibiciones. Sinceramente, a mí el burka me produce repelús, pero es muy interesante intentar ponerse en el lugar del otro y ver su perspectiva. Muchas de esas mujeres, dice ella, se sienten tan aisladas y asustadas que prefieren la seguridad antes que la libertad. Y esto, preferir la seguridad, aunque sea a precio de ataduras, no es exclusivo de las mujeres musulmanas…
Creo que la libertad es más que un derecho que se gana; es algo que cada cual construye cada día, y con tiempo, y que necesita sus medios. En el caso de las mujeres, requiere también formación y una profunda reflexión. Si queremos liberar a las mujeres de países o culturas donde viven sometidas, primero hay que darles la oportunidad de educarse (y lograr que sus familias lo acepten).
En Occidente la esclavitud es otra. La superwoman con mil obligaciones y compromisos es otra forma de sometimiento. La psicóloga argentina Laura Gutman es clarísima al respecto: se ha hecho creer a la mujer que «es menos» por el hecho de ser madre y tener que estar en casa cuidando la familia. Ergo, la mujer será más y ganará derechos y libertad cuando haga lo mismo que el hombre. El problema es más hondo que el reparto de tareas hombre – mujer y la igualdad de oportunidades, que deberían ser dos cosas irrenunciables. El problema es que lo propio de la feminidad se ha valorado menos que lo propio del mundo masculino y aún sigue siendo poco valorado, incluso por el feminismo (que casi niega que haya aspectos connaturales a cada sexo). Cuando ser mamá y ama de casa goce de tanto prestigio como ser empresaria, por ejemplo, algo cambiará.
Ante una exaltación femenina tan potente, me siento un poco raro al mandar un comentario, pero el lema principal «VIVE Y DEJA VIVIR», NO TIENE NI SEXO NI FRONTERAS. ¿De donde lo habrá sacado Bruno?.
Lo que no quiero perder es la oportunidad de comentar sobre EL CUADERNO DE NICOLA KLEEN, que por mi trabajo he tenido la inmensa suerte de leer al completo. ¡¡¡NO OS LO PODEIS PERDER!!!, tanto la trama, como el personaje son SENSACIONALES, como sensacionalmente es la ejecución de Jaume Benavente.
Bravo, Bruno. Es im-pres-cin-di-ble hablar de esto, hoy día. Uno de los grandes problemas que tenemos es que nos sale más fácil (a los humanos y humanas) juzgar que comprender. Debemos esforzarnos por comprender a los demás, y los libros pueden ayudarno a hacerlo. Gracias por tu recomendación y por tu valentía de hoy.